Comenzamos, como siempre, desalando nuestro DonBacalao. Hazlo siguiendo los pasos de nuestro recetario, lo tendrás listo en un par de días.
En primer lugar, vamos a sellar el bacalao, cocínalo por los dos lados, el tiempo dependerá del grosor de cada pieza. Saca el bacalao en esa misma sartén y saltea los pimientos con una pizca de azúcar y un par de ajos. Si cuentas con pimientos del piquillo que no sean en conserva, esta receta será todavía más rica.
Cuando los tengas cocinados y los ajos dorados, añade la nata directamente en la sartén y déjala en el fuego hasta llevarla a ebullición.
Ahora retírala del fuego y deja que se enfríe un poco para, a continuación, batirla. Lo más importante aquí es que quede fina y al punto de sal, así que pruébala y ajusta el sabor. Ya tienes lo más importante listo, ahora solo queda la base de la tostada.
Seguro que muchos hacéis pan casero, si es tú caso, esta será la mejor opción.
Coge el pan que más te guste pero evita la barras corrientes de pan blanco y ve a panes rústicos, de pueblo, de centeno, de masas madre…La primera vez te recomendamos que no lleven frutos secos, una vez cojas soltura con este plato, seguro que hay panes “raros” que conoces que son un absoluto acierto.
Ahora ya solo queda la parte divertida, emplatar. Tuesta la rebanada de pan, coloca un trozo de tu DonBacalao y riégalo con la salsa de pimientos del piquillo. Lo ideal es que todo esté templado pero no muy caliente para que no reblandezca el pan. Por último, decora con un poco de cebollino.